Tabla de contenido
Casi todos nosotros dependemos de las conexiones Wi-Fi de una forma u otra. Conectamos nuestros portátiles, ordenadores de sobremesa, teléfonos y tabletas a una red inalámbrica. A veces pasamos por alto otros dispositivos, como televisores inteligentes, sistemas de juegos, sistemas de seguridad, Alexas, etc.
Cuando nuestro Wi-Fi se cae por razones desconocidas, puede ser comprensiblemente frustrante. Esa frustración puede intensificarse cuando se pierden las comunicaciones de trabajo o de voz en medio de una reunión importante.
Si tu Wi-Fi se detiene, tendrás que resolver algunos problemas. La amplia naturaleza de este problema significa que tendrás que mirar varias cosas para llegar al fondo de la cuestión. Vamos a entrar de lleno y empezar a averiguar por qué tu Wi-Fi sigue desconectándose.
Solución de problemas de su Wi-Fi
Localizar y solucionar un problema de conexión Wi-Fi puede ser frustrante. ¿Por qué? Porque hay muchas cosas que pueden estar fallando. La experiencia y los conocimientos suelen indicar las soluciones más probables, pero no siempre es así.
Por lo tanto, a menudo es mejor empezar por eliminar primero las cosas que sabemos que no son la causa. La vieja cita de Sherlock Holmes es válida en este caso:
"Una vez que eliminas lo imposible, lo que queda, por improbable que sea, debe ser la verdad".
Veamos cómo podemos utilizar esta lógica para resolver el misterio de tu conexión Wi-Fi.
Posibles áreas de preocupación
Hay cuatro áreas principales de preocupación que debemos comprobar. Si podemos descartar todas menos una de ellas, entonces estamos más cerca de encontrar al culpable. Esas áreas son el dispositivo, el router inalámbrico, el módem (si no está integrado en el router) y el servicio de Internet. Al eliminar estas posibilidades, llegaremos a nuestra solución más rápidamente.
Lo primero y más fácil de descartar es tu dispositivo. ¿Ha tenido tu dispositivo un problema similar en alguna otra red Wi-Fi? Si no lo sabes, siempre puedes ir a casa de un amigo, a una cafetería o a una biblioteca y probarlo allí.
Si el dispositivo en cuestión es un ordenador de sobremesa, no puedes hacerlo. Una cosa que puedes hacer es ver si otros ordenadores de la red tienen el mismo problema. Es posible que tu ordenador o dispositivo tenga algún tipo de problema de compatibilidad con tu red. Sin embargo, si otros aparatos tampoco pueden conectarse a la Wi-Fi, puedes decir con seguridad que tu dispositivo no es el origen del problema.
Si has descartado el dispositivo o el ordenador, has reducido el problema a tu router/módem o al ISP. Probar otro router con tu conexión a Internet es una excelente manera de determinar si el router es el problema. Obviamente, no solemos tener un router de repuesto por ahí para hacer pruebas. Podrías pedirle uno prestado a tu amigo o vecino y probarlo con tu Internet, pero eso puede ser una molestia.
Otro punto de partida es observar las luces de tu router. Pueden decirte mucho sobre su funcionamiento. Puede que tengas que consultar el manual de usuario o buscar la información en Internet para determinar qué significan para un modelo concreto.
Al menos deberías ver algunas luces parpadeantes que indiquen que se están transmitiendo o recibiendo datos. Las luces rojas suelen ser malas; ninguna luz es definitivamente mala. Si el router parece funcionar, sigue adelante y comprueba tu ISP a continuación.
En este punto, prueba a conectarte directamente a Internet con un cable de red. Coge un portátil y conéctalo directamente al módem o al módem/router. Si funciona mientras está conectado por cable, entonces sabrás que el problema no reside en tu servicio de Internet. Si tienes el mismo problema, es muy probable que el problema sea tu servicio de Internet.
Para verificar que el servicio de Internet es el que falla, mira las luces de tu router/módem. Si ves que la luz de Internet no está encendida o está en rojo (consulta la documentación de tu router/módem para determinar exactamente lo que indican esas luces), entonces tu servicio se está interrumpiendo.
Al hacer una combinación de pruebas en estas diferentes áreas, finalmente acotaremos el problema. Una vez que determines si es el dispositivo, el módem, el router o el ISP, puedes profundizar en los posibles dolores de cabeza de esa pieza en particular. Veamos algunos de los más comunes para cada uno.
1. Dispositivo
Los problemas de Wi-Fi que se producen desde el teléfono, el ordenador o la tableta pueden provenir de muchas áreas diferentes. Pero si la conexión Wi-Fi funciona y de repente se cae, hay algunas cosas que hay que mirar. La primera es la configuración de ahorro de energía.
La mayoría de los dispositivos tienen un modo de ahorro de batería. A menudo son configurables. El Wi-Fi es una de las características comunes que pueden apagarse porque consume mucha energía de la batería. Si su dispositivo está inactivo durante un tiempo, es probable que apague su Wi-Fi y, a veces, cuando va a utilizarlo de nuevo, no se vuelve a encender inmediatamente. Hay un cierto retraso en el tiempo que tarda en volver a conectarse; parecerá quesu Wi-Fi no funciona.
Puedes comprobar si este es el problema buscando y desactivando cualquier modo de ahorro de energía. Si después de eso funciona, entonces estás bien.
Si el modo de ahorro de energía no parece interrumpir la conexión, y su dispositivo o portátil tiene un adaptador Wi-Fi de doble banda, intente cambiar a la otra banda, de 5GHz a 2,4GHz. Si no ve ningún problema, entonces podría ser que su adaptador se esté estropeando. También podría ser que no pueda obtener una buena señal en su ubicación. Mientras que la banda de 5GHz puede ser más rápida, la banda de 2,4 GHz transmite más lejos ya través de los obstáculos mejor.
Un problema común, sobre todo en los portátiles, es el adaptador Wi-Fi. La mayoría de los portátiles vienen con un adaptador Wi-Fi integrado de fabricación barata. Se estropean con facilidad por el uso intensivo y, a veces, simplemente fallan por sí solos. La forma más fácil de comprobarlo es conseguir un adaptador Wi-Fi USB barato. Se pueden conseguir por menos de 30 dólares; tener uno de repuesto a mano te ayudará a probar los dispositivos siempre que lo necesites.
Sólo tienes que conectar el adaptador Wi-Fi USB a tu portátil y dejar que se instale el software necesario. Una vez que esté en funcionamiento, si ya no ves el problema, sabrás que se trata de un adaptador Wi-Fi estropeado. Puedes utilizar el adaptador USB o comprar uno nuevo para solucionar el problema.
2. Router Wi-Fi
Si parece que el problema es tu router inalámbrico, hay un par de cosas que puedes probar. La primera es reiniciar tu router. Si no lo has reiniciado en un tiempo, esta sencilla solución podría arreglar todo. También deberías ver si tu firmware está actualizado. Una de estas dos soluciones podría hacer que vuelvas a funcionar.
Si el reinicio y el firmware no surtieron efecto, y tienes un router de doble banda, prueba ambas bandas y comprueba si el problema persiste. Si no lo hace, podría ser la ubicación de tu router. Si el router está situado cerca de densos muros de hormigón o estructuras metálicas, es posible que tengas puntos muertos. Utilizar la banda de 2,4 GHz, más lenta pero más potente, suele resolver un problema de cobertura Wi-Fi.
Sin embargo, es posible que los reinicios, las actualizaciones de software y el cambio de bandas Wi-Fi no le den la solución rápida que busca. También debe comprobar los cables que conectan su router. Supongamos que el cable de red o de alimentación está suelto, deshilachado o parcialmente cortado. En ese caso, provocaría que su router perdiera la conexión o la alimentación de forma intermitente.
También deberías probar a mover el router a otra ubicación y ver si eso resuelve tu problema.
Otra posibilidad: tu red Wi-Fi está saturada. Si tienes demasiados dispositivos conectados, algunos pueden ser expulsados o perder la conexión periódicamente. Empieza por mover algunos dispositivos a la otra banda. Si ambas bandas están saturadas, puede que tengas que invertir en un segundo router o eliminar algunos dispositivos de la red por completo.
Es posible que hayas cambiado inadvertidamente un ajuste en tu router que esté causando un problema. ¿Has entrado últimamente en la interfaz de configuración de tu router? Es posible que hayas cambiado algún ajuste sin saberlo. Como último recurso, haz un restablecimiento de fábrica en el router y comprueba si eso cambia la situación.
Al hacer un restablecimiento de fábrica, tendrás que configurar el router de nuevo con un nombre de red y una contraseña. Es posible que quieras mantener el mismo nombre de usuario y la misma contraseña, ya que no querrás tener que volver a cambiar la configuración de conexión de todos tus dispositivos.
Si todas las soluciones anteriores fallan, entonces podría ser que tu router esté fallando. Si todavía está en garantía, comprueba con el fabricante o con tu proveedor de servicios de Internet. Si tu router es viejo y está fuera de garantía, consigue uno nuevo.
3. Módem
Si el módem no está integrado en el router y parece ser el problema, el primer paso es reiniciar el equipo. Para ello, desenchúfalo, espera unos segundos y vuelve a enchufarlo. A veces, un simple reinicio soluciona el problema. Si no lo hace, probablemente necesites un nuevo módem.
4. ISP
Si has reducido el problema a tu proveedor de servicios de Internet, no hay mucho que puedas hacer por tu cuenta. Lo único que puedes comprobar es el cable de Internet, la línea o la fibra que llega a tu casa u oficina. Asegúrate de que no esté cortado, deshilachado o suelto. Si no ves nada evidentemente malo en tu cable, ponte en contacto con tu proveedor y hazle saber lo que ocurre. Ellos te darán los siguientes pasos.
Consejos finales
La desconexión del Wi-Fi puede ser realmente frustrante. A menudo es difícil determinar la causa del problema.
Pruebe su equipo, incluidos los dispositivos, el módem/router y el ISP, y luego utilice la lógica para determinar dónde se origina el problema. Una vez que tenga una buena idea de qué parte está causando el problema, puede utilizar algunos de los métodos que hemos proporcionado para resolverlo.
Como de costumbre, le rogamos que nos comunique si tiene alguna pregunta o comentario.