Tanto si estás preparando la última epopeya cinematográfica como si estás montando un podcast para unos cuantos amigos, conseguir un audio de buena calidad es muy importante.

Los problemas a la hora de capturar audio pueden ocurrir independientemente de quién esté realizando la grabación o de cuál sea la situación. Es una de esas cosas que pasan. Puede ocurrir en un estudio de grabación profesional o en un entorno doméstico.

Sin embargo, es posible tomar medidas para mejorar la calidad del audio, tanto en el momento de la grabación como después, en la posproducción. Y con un poco de conocimiento y habilidad, estarás grabando un gran sonido en un abrir y cerrar de ojos.

Mejora de la calidad de audio

Hay muchas formas de grabar un buen audio y mejorar su calidad. Éstos son nuestros siete consejos principales.

1. Elegir el estilo de micrófono adecuado

El primer paso para mejorar la calidad de tu grabación es elegir el micrófono adecuado. Conseguir un micrófono de buena calidad marcará una gran diferencia.

Muchos dispositivos, desde teléfonos hasta cámaras, incorporan micrófonos. Sin embargo, la calidad de estos micrófonos rara vez es superior a la media, por lo que invertir en un micrófono adecuado garantizará una grabación de mucha mejor calidad.

También es importante elegir el micrófono adecuado para cada situación. Si vas a entrevistar a alguien, los micrófonos de solapa son una buena inversión para las grabaciones de voz. Si vas a hacer podcasting, un micrófono de pie o brazo será una buena inversión. O si estás fuera de casa, los micrófonos de grabación de campo son una buena inversión.

Hay tantos tipos de micrófonos como situaciones para grabar, así que tomarse el tiempo necesario para entender y hacer una buena selección realmente dará sus frutos.

2. Micrófonos omnidireccionales frente a unidireccionales

Además de seleccionar el tipo de micrófono adecuado para lo que vas a grabar, también es importante elegir el que tenga el patrón polar correcto. El patrón polar se refiere a la forma en que el micrófono recibe el sonido.

Un micrófono omnidireccional capta el sonido desde todas las direcciones, mientras que un micrófono unidireccional sólo capta el sonido desde arriba.

Ambos tienen sus ventajas, dependiendo de lo que quieras grabar. Si quieres captarlo todo, lo mejor es un micrófono omnidireccional. Si quieres grabar algo en concreto y reducir el ruido de fondo, lo mejor es un micrófono unidireccional.

Los micrófonos unidireccionales son una buena opción para grabar voces y cualquier otra cosa en directo. Los micrófonos omnidireccionales son buenos para grabaciones ante la cámara o en cualquier circunstancia en la que sea necesario sujetar un micrófono a algo, como un brazo.

La elección correcta te ayudará a garantizar que el audio se capture tal y como deseas.

3. Software y Plugins

Una vez que hayas grabado el audio, es probable que quieras limpiarlo y editarlo en una estación de trabajo de audio digital (DAW). Hay muchas DAW disponibles en el mercado, desde herramientas profesionales de gama alta como Adobe Audition y ProTools hasta programas gratuitos como Audacity y GarageBand.

Ninguna grabación es perfecta al cien por cien, por lo que saber cómo corregir errores o fallos puede suponer una diferencia sustancial en la calidad de sonido del archivo de audio.

Todos los DAW incluyen algún tipo de herramienta para editar y limpiar el audio: puertas antirruido, reductores de ruido, compresores y ecualizadores, todo lo cual puede cambiar enormemente el sonido.

También hay disponibles muchos plug-ins de terceros que mejorarán las herramientas de tu DAW, como Audio Suite de CrumplePop, que contiene una serie de herramientas que te ayudarán a mejorar la calidad del audio.

Si ha grabado en un entorno lleno de eco, es fácil eliminarlo con EchoRemover. Si tiene un entrevistador que lleva un micrófono de solapa y le roza la ropa, el sonido del roce puede eliminarse con RustleRemover. Si la grabación está llena de ruido de fondo o zumbidos, puede eliminarse con AudioDenoise. Todo el conjunto dees notable y mejorará la calidad de sonido de cualquier grabación.

Tanto si utilizas el conjunto de herramientas integradas en tu DAW como uno de los muchos plug-ins de terceros, seguro que hay programas que te ayudarán a crear un sonido perfecto.

4. Más vale prevenir que curar

La mejor forma de mejorar el audio es, por supuesto, no tener problemas con él desde el principio. De ese modo, tendrás mucho menos trabajo a la hora de editar y producir tu pieza final.

Y unas pocas y sencillas elecciones pueden marcar la diferencia en la calidad del sonido.

Invertir en una pantalla antipop para tu presentador o cantante puede eliminar las plosivas, las sibilancias y el ruido de la respiración, que pueden ser un verdadero problema, sobre todo cuando se trata de podcasts, pero invertir en una pantalla antipop es una forma barata y sencilla de mejorar el audio.

Asegúrate de estar cerca del micrófono cuando grabes. Quieres que el micrófono pueda captar una señal fuerte y clara, y cuanto más cerca estés, más fuerte será el sonido grabado. Lo ideal son unos 15 centímetros del micrófono, y si tienes un filtro antipop entre el micrófono y tú, mucho mejor.

Cuanto más alto suene al grabar, más baja puede ser la ganancia en la interfaz de audio o en el software de grabación. Esto también ayuda a mantener al mínimo el ruido de fondo, los silbidos y los zumbidos.

5. El entorno afecta a las grabaciones

Si estás sobre el terreno, es posible que no puedas hacer mucho para controlar el sonido, pero si estás grabando en casa o en un estudio, merece la pena que te asegures de que el entorno de grabación sea lo más silencioso posible.

Incluso algo tan simple como el crujido del papel -si tienes notas o letras delante, por ejemplo- puede arruinar unas grabaciones que, de otro modo, tendrían un sonido perfecto. Dedicar tiempo a prestar atención a este tipo de detalles ayudará a cualquier productor en ciernes.

Del mismo modo, asegúrate de apagar todos los equipos eléctricos que tengas en el espacio de grabación. No sólo pueden generar ruido, como los ventiladores de refrigeración internos, sino que también pueden producir ruido propio que puede ser captado por la grabación. Esto puede aparecer como un zumbido o silbido en la grabación y es un problema con el que nadie quiere tener que lidiar.

6. Utilizar grabaciones de pruebas

Estar preparado de antemano para la grabación es realmente importante. Cuanto más tengas pensado, menos problemas tendrás cuando le des al botón de grabar.

Hacer una grabación de prueba es una buena manera de asegurarse de que está bien preparado. Hay dos formas de hacerlo.

Tono ambiente y ruido de fondo

Graba sin decir nada y luego vuelve a escuchar. Esto se llama obtener el tono de la habitación y te permitirá oír cualquier cosa que pueda causar problemas a la hora de grabar. Silbidos, zumbidos, ruido de fondo, gente en otra habitación... todo se puede captar y, una vez que sepas qué problemas potenciales hay, podrás tomar medidas para solucionarlos.

El tono de la sala de grabación también puede ayudar a las herramientas de reducción de ruido de tu DAW a mejorar la calidad del sonido.

Si capturas el tono de la sala, el software puede analizarlo y averiguar cómo eliminar el ruido de fondo del audio grabado. De esta forma, puede aumentar la calidad del sonido de tu archivo de audio.

Grabación de prueba

Graba cantando o hablando, según lo que estés grabando, para ajustar la ganancia y asegurarte de que recibes una buena señal.

Si la ganancia es demasiado alta, el sonido se distorsionará y resultará desagradable. Si es demasiado baja, es posible que no se oiga nada. Calibrar la ganancia correctamente requiere un poco de práctica y variará en función de quién utilice el micrófono: la gente habla a distintos volúmenes y, por tanto, también producen sonidos de distinta calidad.

De este modo, obtendrás la señal más potente en la pista de audio, sin distorsiones y con una mejor calidad de grabación en general.

7. Utiliza canales separados para mejorar la calidad del sonido

Si estás grabando a un vocalista, las cosas son bastante sencillas: puedes grabarlo cantando en una pista y editarla después.

Sin embargo, si vas a grabar varias fuentes, como invitados en un podcast, lo mejor es que intentes capturarlas en canales de audio independientes, ya que así obtendrás un audio de alta calidad con el que será más fácil trabajar.

Esto te facilitará mucho las cosas a la hora de editar, ya que podrás controlar la ganancia y los efectos que quieras utilizar en cada pista de tu grabación de audio por separado, en lugar de en todas juntas.

Y si estás grabando a presentadores que se encuentran en lugares físicamente distintos, es probable que cada uno tenga sus propias características, como ruidos de fondo y zumbidos. Si mantienes a cada uno en una pista distinta, te aseguras de que puedes editar y limpiar cada uno según sea necesario.

Conclusión

Grabar audio es todo un reto, y hay muchas cosas que pueden causar problemas, desde anfitriones con sibilancia hasta ruidos de fondo que hay que editar. Tanto si eres un ingeniero de sonido profesional como si lo haces por diversión, siempre querrás obtener la mejor calidad de sonido posible.

Sin embargo, con un poco de práctica, conocimiento y paciencia, ¡podrás mejorar la calidad de tu audio sin límites!